porque no le pesa el deseo en el cuerpo
no le rompe los huesos un amor
profundo y cruel y desesperado y atroz
porque a mí me destruye el sueño
que mi nombre no resuene ahí,
en el pecho, entre los latidos del corazón
entonces voy y vengo
y sonrío y digo cosas
que no tienen sentido
y finjo que puedo ser
lo que me pide que sea
entonces me levanto
y salgo a fumar
y el corazón me explota
y finjo que no siento
nada más
no siento nada más